-- Hay que ser mitad opositor y mitad loco, para dar este paso. Yo, que iba por la vida con un punto de exceso, aprendí a protegerme de mí mismo fornicando con mujeres desconocidas, y por supuesto, sin compromiso. Me sentía relativamente satisfecho, era una forma de evitar las exigencias que trae el despertar sexual. ¡Hasta que conocí a Ofelia!. - " Ser o no ser " - ¡ Solo sé que era una mujer fetén!. De primeras, me sedujeron sus secretismos. Les seré sincero, nunca llegué a poseerla del todo, y eso me atraía más aún. Pocas veces el…