Las MENINAS lo pintó al final de su vida,1657, murió tres años después, y es la consecuencia de todo lo aprendido; es un cuadro discutido y explicado de mil maneras, y esa es su grandeza, el ser un cuadro abierto a multiples interpretaciones. No es normal que un pintor se retratara así mismo en una habitación al lado de la familia real y su corte. Lo que ocurre es que Velázquez tenía un gran concepto de sí mismo, y era muy consciente que estaba pintando una obra única, diferente. Nos está interpelando, nos mira, para decirnos, mirad soy yo, Diego…